24.5.11

Muestranos al Padre...


Por Héctor Balvanera A.
Bienes Culturales, Arquitectura y Arte Sacro

Jesús el Cristo: la imagen del Padre; el tema del arte más representado. Múltiples rostros y una sola inspiración: contemplar el rostro del Creador. 

El profeta Isaías pintó una escena coloreada de pasión y dramatismo (Is 53), prefiguración del Calvario.

La imagen, a la izquierda del lector, nos muestra una talla de tipo alemana, de principios del S. XX, procedente del Monasterio Benedictino de Humacao Puerto Rico.

El maestro artesano modeló en la madera "una instantánea" del sacrificio salvífico. Se puede percibir la intención de provocar un gesto de piedad; como quien para tomar una instantánea, detiene brevemente su propia respiración, con delicadeza, para no profanar ese momento sagrado.  

...el que me ha visto a mi, ha visto al Padre (Jn 14,9)...



Isaías  53

¿Quién dio crédito a nuestra noticia? Y el brazo de Yahveh ¿a quién se le reveló?
Creció como un retoño delante de él, como raíz de tierra árida. No tenía apariencia ni presencia; le vimos y no tenía aspecto que pudiésemos estimar. 
Despreciable y desecho de hombres, varón de dolores y sabedor de dolencias, como uno ante quien se oculta el rostro,  despreciable, y no le tuvimos en cuenta.

¡Y con todo eran nuestras dolencias las que él llevaba y nuestros dolores los que soportaba! Nosotros le tuvimos por azotado, herido de Dios y humillado.
 

El ha sido herido por nuestras rebeldías, molido por nuestras culpas. El soportó el castigo que nos trae la paz, y con sus cardenales hemos sido curados.
Todos nosotros como ovejas erramos, cada uno marchó por su camino, y Yahveh descargó sobre él la culpa de todos nosotros.

Fue oprimido, y él se humilló y no abrió la boca. Como un cordero al degüello era llevado, y como oveja que ante los que la trasquilan está muda, tampoco él abrió la boca.

Tras arresto y juicio fue arrebatado, y de sus contemporáneos, ¿quién se preocupa? Fue arrancado de la tierra de los vivos;  por las rebeldías de su pueblo ha sido herido; y se puso su sepultura entre los malvados y con los ricos su tumba, por más que no hizo atropello ni hubo engaño en su boca.

Mas plugo a Yahveh quebrantarle con dolencias. Si se da a sí mismo en expiación, verá descendencia, alargará sus días,  y lo que plazca a Yahveh se cumplirá por su mano. 
Por las fatigas de su alma, verá luz, se saciará.  Por su conocimiento justificará mi Siervo a muchos y las culpas de ellos él soportará.
Por eso le daré su parte entre los grandes y con poderosos repartirá despojos,  ya que indefenso se entregó a la muerte  y con los rebeldes fue contado, cuando él llevó el pecado de muchos, e intercedió por los rebeldes.


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